Uno de los grandes retos de la educación, y en especial si hablamos de una educación inclusiva es atender de manera adecuada al alumnado, para potenciar al máximo sus capacidades y, en definitiva, garantizar su aprendizaje. En consecuencia, la atención a toda la diversidad requiere profesionales con experiencia una buena formación y con conocimientos actualizados, de ahí la importancia de que ustedes se estén formando en esta Maestría en Educación aquí en la Escuela de Posgrado de la UNE.
Para esta Clase 2, trabajaremos sobre “el lenguaje y sus diferentes trastornos” que surge como parte de una necesidad del homo sapiens por su pensamiento abstracto e inventivo, y la evolución del aparato fonador para que se produjeran sonidos inteligibles, las cuales nos diferencian en nuestra condición humana.
La importancia del lenguaje es innegable. El lenguaje es la base de la comunicación del ser humano, nos permite expresarnos y comprender a los demás; y, dependiendo de cómo lo utilicemos, vamos a construir e interpretar el mundo de manera diferente.
Esto significa que el habla en los seres humanos habría evolucionado a medida que el cerebro aumentó sus conexiones en la región que controla ese aparato vocal. La habilidad de hablar, entonces, no se debe puramente a que los seres humanos sean más inteligentes que otros primates.